No tengo perdón por haber tardado tanto en compartir esta receta baja en hidratos (apta para dieta cetogénica) pero alta en nutrientes. El truco, obviamente, está en la base de la pizza, que no lleva gluten ni cereales ni lácteos
No tengo perdón por haber tardado tanto en compartir esta receta baja en hidratos (apta para dieta cetogénica) pero alta en nutrientes. El truco, obviamente, está en la base de la pizza, que no lleva gluten ni cereales ni lácteos
Una coliflor pequeña o media coliflor grande (sin el tallo) rallada
2 huevos grandes
sal y pimienta
1 C de orégano (opcional)
1 c de ajo en polvo (opcional)
Rallar la coliflor con la parte gruesa de un rallador o con un robot de cocina a baja potencia (en Thermomix al 4 durante 10 segundos).
Colocar en un bol y calentar a potencia máxima en el microondas durante 6-8 minutos. Con cuidado de no quemarte, mete la coliflor en una bolsa de bebidas vegetales para retirar TOTALMENTE el líquido.
Una vez bien escurrida (tendrás que apretar mucho mucho), dejar que se enfríe un poco y mezclar con los huevos previamente batidos. Salpimentar y echar las especias que te gusten (orégano y ajo seco son mis favoritas).
Estirar bien y colocar sobre papel sulfurizado, en una fuente de horno, la masa y darle la forma deseada. IMPORTANTE: hornear primero SOLO LA MASA con el horno precalentado a 180 ºC (arriba y abajo) durante unos 20 min o hasta que empiece a tostarse.
Sácala y coloca tus ingredientes favoritos encima. Esta vez yo le puse salsa de tomate casera, espinacas, carne picada de ternera de pasto, aceitunas y más orégano. También está buenísima la versión vegetal con salsa de tomate, calabacín finito en rodajas y cebolla caramelizada.
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